querido eduardo 2

Cuando uno está muy,pero muy distraído,no se da cuenta de las consecuencias a largo alcance que acarrea la propia tración. Mi hogar paterno fue también un modelo para armar.Aprendí a hacer y a sentir todo lo que se espera que una mujer haga y sienta.Desde limpiar,cocinar,coser,planchar,hasta tragarme la rabia,no responder ni mucho menos cuestionar lo que decían los mayores.Fue en mis primeros años cuando entré en contacto con unas muñecas que siempre odié.Porque en realidad me encantaban los soldaditos y las pelotas de fútbol de mis hermanos.Y hasta los Reyes Magos me enseñaron con lo que “debía” jugar una niña de buena familia como yo.Entonces,Eduardo,te imaginarás a esta altura que lo que mejor me salió en la vida fue reprimir! En realidad,estamos entrenados para reprimirnos.De esa forma no nos damos cuenta de que diariamente alimentamos a una bestia que no sabemos que existe.Peor aún…que coexiste con nosotros en total oscuridad .. Vivimos enojados y no conocemos el motivo real.Le echamos la culpa al gato que maúlla, porque está en celo.O tal vez al día, porque está nublado. A veces aparece un chivo expiatorio para descargar la artillería de la ira sobre la pareja o sobre un hijo.Y tántas variantes como las que se te ocurra pensar.Reconocer que el enojo es hacia uno mismo requiere meter el dedo en la llaga.Y eso duele mucho.Por lo general,lo evitamos.Porque nos hace vulnerables.Otra vez el miedo a sentir… La tecnología va cobrando la delantera en la carrera contra el aburrimiento.Estar aburrido equivale a sumergirse hasta la coronilla en el cieno de la negación.Con el pretexto de estar informados,ponemos toda nuestra energía en dar de comer a los desconocidos de siempre.Los sponsors del terror,el hambre,la miseria y las pestes vociferan encaramados desde el púlpito intocable del poder,mientras que por otras vías menos ostentosas van emergiendo generaciones que lo cuestionan todo.Algunos se agrupan para que sus voces unidas puedan llegar a oídos menos sordos que la Iglesia o el Estado.Otros ,en cambio,son como aves solitarias que dejan huellas anónimas a través de actos simples y cotidianos que imprimen una luz diferente en la conciencia de quienes cruzan a su paso. Hay rumores de una profunda transformación.Y también hay resistencias.Intereses creados para sostener lo establecido por los siglos de los siglos. Cabe preguntarse aquí hasta dónde el pensamiento concuerda con la palabra y luego con la acción.El viento del cambio soplará a favor del hombre y del planeta todo cuando el ejercicio de la claridad sea hecho en escalas cada vez mayores.Sin claridad corremos el riesgo de perdernos en una gran tormenta. Volviendo al tema de mi deformación,es muy llamativo observar de qué manera nos tendemos trampas para luego caer en ellas. Cuando terminé el colegio,de alguna forma me sentía incómoda con el Dios que me presentaron las monjas católicas.Esa incomodidad me condujo al encuentro con una de las sectas hindúes más populares y atractivas para los autoevasores, entre los cuáles ,por supuesto me encontraba. Entré atraída por la música oriental y el sabor de la comida de la India.Poco tiempo después,ingresé a la organización como miembro activo, con el cerebro perfumado a shampú.Obviamente,de sándalo! Mi paso por esa experiencia incrementó el porcentaje de culpa que arrastraba desde el colegio.La secta a la que hago referencia ponía al ser humano en una condición patética,miserable. Cuando me duchaba,tenía que hacerlo con ropa interior para que el dios hindú no me viera desnuda.Según esa filosofía,la mujer es la fuente de todos los horrores imaginables de este mundo y la responsable de la decadencia de la humanidad. Remitiéndome a las palabras textuales del guía espiritual fundador de dicha organización internacional,en los párrafos de sus numerosos libros al referirse a la mujer lo hace inexorablemente con la siguiente sentencia:”LA POCO INTELIGENTE CLASE FEMENINA’ En el lugar